lunes, 21 de enero de 2013

El marrano de San Anton en la Bañeza

Como salmantina de pro, conocia la tradición por la que en la Alberca.el dia de San Anton se sortea un cerdo que durante todo el año se ha paseado con un cascabel al cuello  por las calles de esta preciosa villa serrana. Un cerdo a quien todos alimentan y cobijan en sus cuadras. Antiguamente se entregaba el 17 de enero a una familia sin recursos. En nuestros dias, se dona el importe recaudado a una ONG.




Pero no es el unico cerdo protagonista en San Antón. Soy testigo de que en la Bañeza, también hacen fiesta de la rifa de un cochino, adquirido por los cofrades de la hermandad, al que se pasea en carroza engalanada, al son de la dulzaina y el tamboril. Alli la rifa se realiza el domingo y el lunes es un dia de misa, comida, bailes y procesión.




Preparación todo ello del carnaval que se nos avecina...

Y de postre... estos cupcakes marraniles. ¿A qué son totales?




sábado, 5 de enero de 2013

Perdiz con chocolate





Poco a poco las cosas vuelven a su cauce y nuevas rutinas sustituyen a las antiguas. Las mañanas de los domingos urbanas tienen otro olor y pasear en la ciudad desierta es un lujo. Echo de menos  la tierra húmeda en invierno y sobre todas las cosas, mi chimenea. El fuego de leña que convierte la casa en hogar.  Pero son más las promesas que las perdidas.

Lo que no termina de encajar es mi cocina. Digamos que tengo astenia invernal. NO ME APETECE guisar. Y eso pese a que me pasé en la cocina toda la tarde del día de noche vieja y disfrute un montón.


Será que no  es cierto que no me apetece guisar, lo que no me apetece es comer. Y reflexionando llego a la conclusión de que eso tampoco es cierto, no me apetece comer lo que guiso, prefiero comer cosas poco elaboradas o casi crudas o pequeñas raciones de tapas en los bares.

A la vista de lo cual y puesto que no quiero desvincularme del blog, haremos que este cambie. Vamos a documentar pequeños platos, viajes gastronómicos y otros descubrimientos. Al menos de momento.

La receta de este post es navideña. Y exótica sin dejar de ser tradicional. A mi me recordó vagamente al aroma del pato lacado pekinés.


Ingredientes

2 perdices
150 gr. de chocolate de postres
1 cebolla
dos dientes de ajo
cayena
pimienta
sal
un vasito de vino tinto
medio litro de caldo de ave



El primer paso es dorar las perdices previamente salpimentadas, las retiramos del fuego y doramos la cebolla muy picada y el ajo. una vez sofrito, añadimos las perdices. Añadimos también el caldo y el vino previamente calentados y dejamos cocer a fuego medio una hora media, hasta que esta tierna. Rallamos entonces el chocolate y le añadimos parte del caldo caliente y la cayena y batimos bien hasta obtener una salsa espesa que verteremos sobre el guiso. Dejamos cocer unos minutos pero esta vez a fuego muy suave porque el chocolate se quema facilmente. Este plato sabe mejor cocinado el día anterior porque los sabores se mezclan más,