Semana santa.
Plan A procesiones castellanas y frío polar.
Plan B visita a tierras gallegas y seguramente lluvia a manta.
Pero es que este plan B tiene truco porque incluye buena compañía y shopping. Y además raciones de pulpo. Y para colmo no llovió tanto... Así que buena elección, la que incluía este rape con cachelos que calienta el cuerpo y el alma. Con Albariño para colmo.
Ingredientes:
Un rape
patatas
azafrán
Vino blanco
cebolla
ajo
perejil
aceite
limón
Le pedimos al pescadero que nos conserve cabeza y espinas y desperdicios del rape y por la noche ponemos a macerar los trozos de rape limpios en un majado de ajo y azafrán al que añadiremos sal y medio litro de vino blanco, un chorro generoso de aceite y el zumo de limón, con un poco de agua si es necesario para cubrir el pescado. Dejamos así toda la noche. Con los huesos preparamos un fumet y reservamos.
A la mañana siguiente peparamos un sofrito con cebolla y un diente de ajo y añadimos las patatas en rodajas gruesas y después de un par de minutos el fumet. Dejamos cocer hasta que estén aún tiesas . Añadimos entonces el pescado con su adobo y dejamos cocer a fuego lento otros 10 minutos. Deberían vender un ambientador con olor a rape con patatas!!!!
Y ya está. Solo queda probar la sal y emplatar salpicando con un poco de perejil muy picado.
Lo dicho...vivamos como gallegos.
3 comentarios:
Ole, ole, yo también habría escogido el plan B aún sin saber nada del rape, pero con ese platazo ya ni te cuento. Le tengo yo muchas ganas a Galicia, pero no encuentro el momento, a ver si el año que viene las vacaciones me dan para más.
Un besote.
Un plato muy sencillo pero delicioso, aún me apetecen este tipo de platos!!! besotes
gracias por elegir el plan B, siempre nos gusta recibir a gente como tu, un plato fantastico, besitos.
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