miércoles, 7 de diciembre de 2011

Colines de pimiento, sésamo y orégano.

Me gustaba ir con mi madre a la panadería porque el pan de cada día se añadía un colín que mordisquear despacito en el camino de vuelta a casa. Primero la corteza casi chupeteando. Después royendo como un ratoncillo el interior. La cosa tenía su ciencia.





Estos que hoy os traigo están tomados del libro panes de Bertinet y son fáciles de hacer.

Mi casa (y dos calles más) olian a pizzeria al hornearlos. Y fueron excelentes para dipear con bastoncitos de verduras crudas y salsa de queso con nueces y salsa de atún y pimiento con mayonesa. Además de ricos, son bonitos.

Ingredientes
  • 250 gr de harina de fuerza
  • medio cubito de levadura  6/7 gr
  • sal
  • agua tibia
  • pimiento asado
  • orégano
  • sésamo
Hacemos una masa con agua. sal,  harina y levadura, relativamente seca, para que podamos manejarla bien. Dejamos levar una hora en un lugar templado (he descubierto  que la yogurtera es un sitio estupendo y si tengo prisa, un poquito de calor abrevia los tiempos de levado)
Aplastamos para expulsar el aire y precalentamos el horno a 250º. Enharinamos una superficie de trabajo y damos forma rectangular a la masa con el rodillo con un grosor de 2 cm. Esparcimos el pimiento muy picadito y doblamos como un sobre y aplastamos un poco. Vamos cortando en tiras. Las retorcemos y las hacemos rodar sobre las hierbas y el sésamo.

En una placa de horno  y con un pequeño recipiente de agua para conseguir que queden crujientes,  los metemos en el horno unos 15 minutos, vigilando siempre.




6 comentarios:

Tuonela dijo...

Qué buena pinta tienen. Y qué bonitos esos recuerdos de la infancia. Yo de pequeña iba sola a comprar el pan (la panadería estaba a un tiro de piedra) y de camino a casa caía la "teta". Recuerdo el sabor de ese pan estupendo, no las barras precongeladas que nos venden ahora en cualquier sitio que dice ser panadería...
Besos.

Salomé dijo...

Yo también recuerdo aquellos colines que sabían a gloria, y después se los daban a mi hijo... creo que ahí se acabo la historia porque ya casi no hay panaderias, todo se ha convertido en hornos eléctricos donde de hornea pan congelado, lástima... claro que siempre podemos hacer el pan en casa y esos colines son la prueba de que merece la pena, y que bonitos quedaron! Besos

Rosita Vargas dijo...

Muy bellas las barritas lucen exquisitos,especial para navidad,abrazos y saludos.

Chez Silvia dijo...

Para comer un palito tras otro, que buenos!!! me la llevo!!!Muaks

Lore dijo...

Me acuerdo que estabamos deseando ir a la panadería para comer un colín de vuelta a casa. Y cuando ya ibas creciendo, deseabas que el panadero no notara que deseabas de nuevo ese colín por encima de todo.

Muy buena receta.

Un besín.

Flor de Canela dijo...

Tiene muy buena pinta y que bonitos tus recuerdos yo también recuerdo cuando iba comprar el pan en mi pueblo que gracia.
bss